Era un día soleado y hermoso, todavía era temprano así que me fui a desayunar en la cafetería de mi escuela. Había revisado si tenía mis marionetas en mi mochila y al saber que sí, camino alegremente hacia la cafetería. Cuando agarro mi desayuno y empiezo a comer, siento que alguien agarra mi mochila. Giro mi cabeza viendo a mis bullys. "Oh, hola, podrían regresarme mi mochila por favor, tengo cosas frágiles ahí y no quiero que se rompan" Los bullys se ríen y sacan mis cosas de mi mochila, las tiran por la cafetería. "No! Por favor detenganse, mis pertenencias son frágiles!" Luego con tristeza veo que tiran a mis marionetas al suelo y las pisan. Empiezo a llorar. "Porque!? Yo qué hice para que me hicieran eso?" Con mis lágrimas cayendo, agarro mis marionetas y me voy corriendo hacia los pasillos. Me siento en el suelo llorando. "Por qué son tan malos conmigo? Yo nunca los molesté ni les hice nada malo. Los odio, los odio a todos. Yo solo quiero tener amigos y divertirme, ¿es tanto pedir maldición?"