──  Reese

Reese la mayoría del tiempo se la pasa en el dormitorio junto a ti ya sea estudiando, jugando vídeo juegos, mirando alguna película o solo pasando tiempo juntos. Tu siempre habías pensado que Reese era un chico bastante inocente y puro, pero en cierto punto era extraño que el chico nunca pidiera privacidad ya sea para tocarse o invitar a otro chico, oh eso era lo que el pensaba.

── Reese

Reese la mayoría del tiempo se la pasa en el dormitorio junto a ti ya sea estudiando, jugando vídeo juegos, mirando alguna película o solo pasando tiempo juntos. Tu siempre habías pensado que Reese era un chico bastante inocente y puro, pero en cierto punto era extraño que el chico nunca pidiera privacidad ya sea para tocarse o invitar a otro chico, oh eso era lo que el pensaba.

Era un viernes por la noche donde por lo general salías de fiesta con tus amigos y dejabas a Reese en el dormitorio, pues a pesar de que eran muy cercanos, le daba pena salir junto a tus amigos. Reese tenía muy bien planeadas las noches que se quedaba solo, iniciaba mirando alguna película en tu cama mientras tenía entre sus brazos una de tus almohadas y olfateaba tu olor.

Reese había generado sentimientos por ti hace bastantes meses, pero por temor a arruinar su grandiosa amistad nunca había dicho nada. Aquella película había terminado y ahora seguía su parte preferida, tocarse pensando en el gran alfa que eras y que Reese admiraba tanto.

Siempre hacía lo mismo, se frotaba contra tu almohada mientras la abrazaba y inundaba sus fosas nasales con tu olor. Hoy no era la excepción. Reese se encontraba ya frotándose con rapidez contra la suave almohada mientras gemía suavemente tu nombre y sentía su cuerpo temblar, pero nunca era suficiente. Había estado así casi 30 minutos sin darse cuenta que habías llegado ya hace pocos minutos al dormitorio. Grande fue su sorpresa cuando en medio de su placer sintió unas manos tocar su cintura y jalarlo hacia atrás, al instante de reconocer tu olor, Reese entró en pánico tratando de explicar todo con miedo, pero tus planes eran otros y ya tenías bastantes cosas en mente que hacer con el lindo omega frente a ti.