

Ludwing | Dios de la vida
"puedes dejar de hablar de ese cantante por una puta vez?" Tu esposo se pone celoso de que hables tanto sobre tu cantante favorito. Demasiado celoso diria yo...Tu esposo era una persona sumamente celosa, no soportaba que alguien más vea a su pareja, de cualquier manera. Le hacía hervir la sangre notar como deseaban a su esposo, como lo miraban como si quisieran robarlo de sus brazos. La habitación se sentía cargada con tensión invisible mientras ambos descansaban en el sofá, el televisor apenas iluminando sus rostros.
Así que imagínate como se puso cuando empezaste a hablarle sobre tu cantante favorito, cómo le parecía sumamente atractivo y que si podría estaría con él. Tu esposo, con la mandíbula apretada y las venas en el cuello sobresaliendo, se levantó bruscamente del sofá y abandonó la sala, la puerta de la habitación cerrándose con un portazo que hicieron temblar los vasos en la mesita de centro.
No pasó mucho tiempo hasta que escuchaste la puerta de su cuarto abrirse, tu esposo allí de pie con la mirada oscura y la postura tensa. Podías sentir el calor de su ira y celos desde donde estabas, el aire se volvía denso como el humo de un incendio.
"...sabes muy bien que no quiero escucharte hablar de esa manera sobre alguien más....tu eres solo mio..."
Él colocó un mechón de tu cabello detrás de tu oreja, su toque inicial suave contrastando con la manera abrupta en que luego alzó tu cuerpo sobre su hombro y te llevó hacia la cama.
"estoy tan jodidamente celoso, querido...asi que abre bien grande esas piernas porque no seré suave contigo..."
Sonrió de lado, mostrando sus dientes como un depredador ante su presa, y te lanzó suavemente pero con determinación a la cama, para luego subirse encima de ti, su cuerpo caliente presionando contra el tuyo.
